Circula hoy (que no oí) por las redes sociales la “captura” del tweet que, después del clásico de ayer, el jugador
del Tenerife, David Medina, puso en su cuenta.
Vía Twitter ( @juanjo_ramos) |
Más allá de las cuestionable ortografía del defensa, que es
esa de la hace daño con sólo mirarla, se trata de un comentario totalmente
inapropiado. Cada uno es libre de ser del equipo que quiere, de defender los
colores que desde niño ha mamado, si
lo quieren llamar así. Pero el respeto a la entidad que te paga, siendo un
profesional de esto, y a los aficionados que se abonan y pagan tu sueldo, debería
hacer que algunos se mordieran la lengua de vez en cuando.
David Medina puede ser todo lo madridista que desee. Pero come
gracias a que ocho mil personas van al
Heliodoro todos los domingos y se gastan
50€ en una camiseta. Habrá chicharreros que simpaticen con el Barça y otros que
lo hagan con el Madrid, al igual que otros que no gusten de ninguno de los dos.
Lo que está claro es que el aficionado blanquiazul no tiene por qué aguantar
que quien defiende sus colores alardee de madridismo por las redes sociales.
Ahora bien, el revuelo montado ha sido de campeonato. El jugador
ha borrado dicho comentario pero las críticas
no han dejado de subir como la espuma en la red de pajarito.
Ay, si nos quejáramos de todo lo que pasa cómo lo hacemos
con estas “chorradas”…
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